Los mapas conceptuales

Los mapas conceptuales

Estrategias de aprendizaje Algunas herramientas a disposición de los estudiantes

En un artículo anterior, definíamos las estrategias de aprendizaje como procesos de toma de decisiones, a través de los cuales el estudiante elige y recupera los conocimientos que necesita para cumplimentar una determinada demanda u objetivo.

El docente que incorpora, en las consignas de trabajo, estrategias de aprendizaje está pensando en que los alumnos adquieran los conocimientos disciplinarios junto con herramientas que les permitan aprender a aprender en diferentes contextos y situaciones. Justamente, la elaboración de mapas conceptuales constituye un dispositivo por excelencia para construir andamiajes de conocimientos. El mapa conceptual es la representación gráfica y esquemática de un conjunto de relaciones significativas entre conceptos, jerarquizadas según el mayor o menor nivel de abstracción que presentan para quien construye ese mapa.

¿Cómo iniciar a los alumnos en la elaboración de mapas conceptuales?

Para la iniciación de los estudiantes en el empleo de esta herramienta, proponemos, como ejemplo, trabajar sobre la elaboración de un mapa sencillo, con ideas conocidas o cercanas al conocimiento del alumno. Sugerimos esta secuencia de actividades en la que la técnica del mapa conceptual está incluida en la consigna:

Consigna para tercer curso (sugerencias para el docente):

A partir de la siguiente imagen, elaborarán un mapa conceptual. Para realizar la actividad con los alumnos, los docentes deben tener en cuenta los siguientes pasos:

  1. Pedirles que observen detenidamente la siguiente imagen (pueden presentarla con diapositiva, a través de una transparencia, mediante una fotocopia color o una lámina, o dibujarla en la pizarra).
  2. Transcribir en la pizarra las palabras que aparecen allí.
  3. Pedirles que piensen diferentes oraciones que permitan unir las palabras e invitarles a decirlas en voz alta, intentando explicar las relaciones posibles entre las palabras
  4. Preguntar e indagar: -¿Qué título podríamos poner a esta imagen? ¿Puedes añadir, a esas oraciones, otras palabras? ¿Cuáles?
  5. Pedir, a los estudiantes, que cada uno intente realizar un esquema con las palabras dadas más las que ellos sugirieron, utilizando algunos nexos o conectores, y que las vayan uniendo con flechas.
  6. Luego, hacer que los niños muestren sus mapas conceptuales al resto del grupo, y pedirles que expliquen sus propias producciones. Hacer hincapié en los aspectos positivos, para facilitar que los mapas conceptuales sean una buena experiencia.
  7. Exponer, en el aula, los mapas realizados por los alumnos
Un estudiante genera y emplea una estrategia cuando es capaz de ajustar su comportamiento (lo que piensa y hace) a las exigencias de una actividad encomendada por el profesor y en las circunstancias en las que esa tarea se produce. Cuando le pedimos al estudiante que cierre los ojos e imagine cómo esquematizaría un conocimiento y que lo lleve a una producción real, estamos contribuyendo a la formación del aprendizaje continuo y a la socialización de lo que él está pensando

Ver artículo completo en Maestra de Primaria nº 112

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